jueves, 29 de enero de 2009

“No votes contra Dios, Vota NO”




Comentario por BALARASA:

BOLIVIA

La libertad religiosa y la separación del Estado y la Iglesia, así como el respeto a las religiones originarias, parte de la nueva Constitución, no han sido del agrado del estamento religioso.

Los centros de votación que visitamos en la Paz tenían enormes colas, aunque el proceso transcurría con normalidad y las colas avanzaban. Allí encontramos mucha más diversidad étnica. A los indígenas los acompañaban blancos y mestizos (casi ningún negro). También diversidad en las opiniones políticas. En los primeros centro que visitamos nos conseguimos los primeros NO, y a medida que nos adentrábamos en las zonas de clase media, los NO se volvieron mayoría. La situación política presenta una evidente polarización, similar a la de Venezuela.

Los argumentos de quienes votaban NO eran básicamente dos y han sido los puntales de la campaña de la oposición. El argumento religioso y el de la educación.

Las Iglesias, tanto la católica como la evangélica han realizado una campaña impresionante (por lo manipuladora y amarillista) por el rechazo a la nueva Constitución.

Un cuña de televisión de la Iglesia termina en “No votes contra Dios, Vota NO”.

Tanto en este centro como en los otros tres centros de votación del Alto que fuimos, se respiraba alegría, compromiso y una victoria arrolladora del SI. Los argumentos que nos expresaban en apoyo a la nueva constitución iban desde la lucha al latifundio, o la implementación de una democracia participativa, a un simple “porque ellos no pueden volver a ganar”.

http://www.lostiempos.com/noticias/28-01-09/puntos_de_vista.php
Cochabamba - Bolivia Miércoles, 28 de enero de 2009

Un paso atrás para Bolivia
El resultado del referéndum constitucional en Bolivia ha polarizado también a los medios de comunicación de diversos países del mundo.
Así, los dos principales diarios de España, ABC y El País, opinan al respecto con enfoques divergentes. Reproducimos a continuación un resumen de la nota editorial que con ese título publica el primero; en nuestra edición de mañana incluiremos la versión de El País:

“Con un apoyo bastante menor del que esperaba, el caudillo indigenista boliviano Evo Morales ha logrado imponer una Constitución hecha a la medida de sus aspiraciones para mantenerse en el poder sobre un régimen político basado en criterios socialistas, en lo económico, y racistas, en lo social.

“Las posibilidades de que esta Constitución resuelva los problemas que aquejan a los bolivianos son inexistentes; en muchos casos, es más probable que las divisiones que han quebrado la cohesión de la sociedad boliviana se vean agravadas cuando Evo Morales intente aplicar un marco legal que rechaza una parte importante de la sociedad, mayoritariamente en las ciudades y en las regiones más industriales.

“Como era de esperar, su mentor, el venezolano Hugo Chávez, le ha felicitado efusivamente por la victoria en el referéndum, algo que Morales debería entender como un síntoma de mal agüero: Chávez también hizo su propia Constitución a la medida de sus necesidades y al gusto de sus excentricidades, pero tampoco le ha servido para resolver los desastres que aquejan a Venezuela. …

—¿Y para qué te lavabas ese dedo, es que pensabas votag nuevamente?

—Así es, querida tía Clotilde, pues quiero comunicarte en secreto que tengo dos cédulas de identidad con el mismo nombre y número diferente.

—¿Acaso es posible en nuestra amada tierra boliviana?

—Todo es posible en la oficina de identificación. Si tú quieres, yo te consigo una nueva cédula quitándote 20 años, nacida en Tiraque, y con tu nombre castellanizado que diga Clotilde del Karajo.

—No gracias, sobrino, quiego seg la misma, con 70 años, cochabambina, y llamada Clotilde von Karajan. Bueno, ¿cuál fue el resultado de la votación?

—Fue aprobada la nueva Constitución con una votación aproximada del 60 por ciento, mientras el 40 por ciento la rechaza.

—Eso me parece un dispagate, sobguino, ¿cómo aprobar una Constitución si el 40 por ciento de la población está en contra…?

—Así somos los bolivianos, tía Clotilde. Ahora tendremos una Constitución para pelearnos entre los bolivianos.

—Aufidesen, sobrino.

No hay comentarios: